El Equipo en los tiempos del Brexit


Me encanta participar con directivos y coaches de Aragón para compartir ideas y metodología de Coaching de Equipo ayer viernes por la tarde y hoy sábado por la mañana en el PSLICE de Esic Zaragoza. Mi gratitud a los organizadores y a l@s participantes de este Programa Superior de Liderazgo Innovador y Coaching Ejecutivo (Alberto, Alicia, Ana, Ana Belén, Bernabé, David, Elena, Enrique, Germán, Javier, Laura, Laura B., Román, José Ramón, Victoria). Como bien sabes, un equipo es un grupo humano que genera sinergias y por ello no se improvisa.
Inicio la mañana con la banda de Freddie Mercury, Queen. Que otro muerda el polvo (Another one bites the dust): www.youtube.com/watch?v=rY0WxgSXdEE
Desde ayer, el mundo está conmocionado por el Brexit, la salida del Reino Unido de la Unión Europea (mucha “unión” en el nombre de ambos, poco equipo en realidad). El Brexit es un “cisne negro” (en la terminología de Nassim Nicholas Taleb), una extraña e impredecible combinación de falta de liderazgo (uno de los peores primeros ministros de la historia de Gran Bretaña, adicto a los Referenda; una Unión Europea dividida que le ha dejado hacer, incendiar el continente como un pirómano y alimentar a los populismos), de personajes con mayor influencia (principalmente, el conservador exalcalde de Londres, el periodista Boris Johnson, que reconoce que “se hace tonto para ganar”, y el líder del ultraderechista UKIP Nigel Farage, que han convencido a millones de votantes de que la globalización les quita el empleo, la calidad de vida y la identidad), de una tragedia (el asesinato de una diputada laborista partidaria del Bremain), de un voto activo de vergüenza (las encuestas se equivocaron una vez más porque los sectores más desfavorecidos de la sociedad, el norte y este de Inglaterra, se movilizaron frente a los londinenses y norirlandeses, menos activos). Nuestro compañero Vicenç Álvaro, experto en marketing y fino analista, nos hacía ver ayer que el 64% de los jóvenes británicos de 18 a 24 años votaron “Remain” (quedarse) y el 58% de los mayores de 65 votaron “Leave” (irse). David Cameron ha logrado la polarización (geográfica, de edades y sobre todo social) y por eso después del verano se va a su casa. No hay líder sin equipo ni equipo sin líder.
La libra esterlina ha caído a su nivel más bajo de los últimos 30 años, las bolsas europeas (italiana, griega, española) han descendido más de un 20% (de la de Madrid se esfumaron 60.000 M € de capitalización)... La gran pregunta, que no he visto respondida en las primeras 24 horas, es “¿a quién beneficia realmente el Brexit?”. A las economías extraeuropeas, que pueden comprar a precio de ganga las Islas Británicas; a los populismos, desde Donald Trump (que felicitó en Escocia a GB por su “independencia”) a Marine Le Pen a los movimientos financiados por Irán y los chavistas; a la economía financiera especulativa frente a la economía real.
Para el gran Martin Wolf (FT), los ganadores de este órdago (que David Cameron ha perdido) son Boris Johnson, Michael Gove, Nigel Farage y los diarios The Sun y Daily Mail. Los perdedores, el Reino Unido, Europa, Occidente y el mundo. “Seguramente será el acontecimiento más importante en la historia del Reino Unido desde la II Guerra Mundial. Por encima de todo, es una victoria de los ciudadanos británicos decepcionados y temerosos sobre los que confiaban en la capacidad del Reino Unido de adaptarse al cambio y llevar la voz cantante en Europa”. Es la revuelta de las regiones frente a Londres, del pueblo (no necesariamente culto) contra el establishment, de los populistas contra la inmigración. Conservadores y laboristas necesitan de nuevos líderes. La devaluación de la libra traerá inflación y se creará un presupuesto de emergencia y la economía británica verá reducido su tamaño. La City perderá peso y la incertidumbre campará por sus anchas. Martin Wolf concluye: “Políticos de la talla de Le Pen, Trump y Putin celebran que el Reino Unido haya optado por darle la espalda al gran proyecto europeo destinado a salvar las divisiones. Para mí es uno de los momentos más tristes de la historia”.
Sí, ha triunfado el individualismo sobre el equipo, el egoísmo sobre la generosidad, el miedo sobre la esperanza. Son tiempos convulsos. Sin embargo, Europa tiene todavía las mejores lecciones para dar en un próximo futuro.
Acabo con otra canción de Queen, la banda británica: ‘The show must go on’ www.youtube.com/watch?v=t99KH0TR-J4 El espectáculo debe continuar.