El arte social de la pregunta humilde, por Edgar Schein

Hoy hemos tenido "Talento en Crecimiento" en Málaga, el encuentro de jóvenes organizado por CEDE (Confederación Española de Directivos y Ejecutivos) en el que el Human Age Institute colabora con el firme propósito de contactar cara a cara con más de 3.000 jóvenes y ayudarles a desarrollar su empleabilidad.
Han abierto la jornada el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y  el VP de CEDE, Ramón Adell. Posteriormente un servidor ha tenido el honor de hablar a los asistentes sobre "Actitudes para la Empleabilidad": la gran pregunta, el juego interior, qué es ser joven, el talento como Capacidad por Compromiso en el Contexto adecuado, el triángulo de la Actitud, el valor del ejemplo... Mi gratitud a Pau y todo su equipo de CEDE, a Montse y el suyo de Comunicación y a nuestros compañeros de ManpowerGroup Solutions, que hacen de un evento como éste algo espectacular.
Posteriormente, Luis López, DRH de Deloitte, nos ha hablado de cómo afrontar un proceso de selección paso a paso. Ha sido  un enfoque eminentemente práctico y muy sólido.
Tras el café, los nuevos retos del mercado laboral, por Francisco José Pérez Fresquet, Executive Director de Loyola Leadership School. En un mercado cada vez más exigente y competitivo, determinadas capacidades (flexibilidad, liderazgo) marcan la diferencia.
De 13 a 14 horas, Aprender de la Experiencia Internacional, con mis buenas amigas Adelaida de la Calle (Rectora de la UMA) y Camilla Hillier-Fry (PeopleMatters). Y tras el almuerzo, María Salamero,DG de ADN (Aqua Development Network) y de la Escuela del  Agua; y Salva López, profesor de Esade que se define como mindshaker, edutainer y learnaholic, nos ha presentado el mercado laboral como un vídeojuego ficticio en el que hay conocer bien las reglas.
He estado leyendo "Preguntar con humildad. El sutil arte de pedir en lugar de exigir" de Edgar Schein. Admiro a Schein como padre de la idea científica de las culturas corporativas a principios de los 80. Estudiante en Chicago y Stanford, doctorado en Harvard, pasó cuatro años en un instituto del ejército investigando las relaciones humanas y realizó su primer trabajo importante sobre el adoctrinamiento de prisioneros en la China comunista (Coercive Persuasion, 1961). De ahí pasó a analizar las relaciones del individuo con la organización (Interpersonal Dynamics, tercera edición, 1973, con el gran Warren Bennis) y el concepto de "anclas laborales" (Career Dynamics, 1978). De su conocimiento de las culturas corporativas, dos libros esenciales: "La cultura empresarial y el Liderazgo" y "The Corporate Culture Survival Guide". Schein analizó en profundidad el éxito económico de Singapur y ellegado de Digital Equipment Corporation (DEC). Y su último libro hasta la fecha había sido "Helping:  How to offer, give and receive  help", de 2009.
En la actualidad vive retirado en Palo Alto, tras 50 años de consultoría y docencia. Para Schein, "la pregunta humilde es el arte sutil de conseguir que otros se abran, que formulen preguntas cuya respuesta no conoces, de forjar una relación basada en la curiosidad y el interés por la otra persona".
Para mejorar nuestra comunicación, debemos hablar menos, formular más preguntas con humildad y aprender a escuchar y ser más agradecido. Las preguntas con humildad favorecen la confianza por ambas partes.
Schein define la humildad como otorgar al otro un estatus superior al que reclama para sí. Por ello, la hay de tres tipos: humildad básica, en las sociedades tradicionales, para el estatus por posición social; humildad optativa, por mérito o conocimientos; humildad "aquí  y ahora", que es la que sientes cuando reportas a un jefe. Esencial en el auténtico liderazgo.
El autor  nos presenta varios ejemplos: un equipo quirúrgico,  una pareja, un departamento, un comité de dirección, un nuevo equipo de trabajo, un cambio cultural...  Preguntar requiere de genuino interés, curiosidad y empatía. Sinceridad y colaboración para la apertura.
Hay cuatro tipos  de pregunta: humilde, diagnóstica (control de la conversación),  antagónica (insertar las propias ideas)  y orientadas al  proceso. Nuestra cultura, hasta ahora, es de "hacer  y contar".  Schein es sanamente crítico  con la cultura de EEUU:  valora  más  los  logros que las relaciones,  fomenta  la  desconfianza,  es  de afirmación.  Una cultura pragmatista, individualista y de estatus por logro.  Un reto para  los líderes-coaches en el talentismo.
Los inhibidores de las preguntas humildes son el  propio estatus, el rango y los límites  de los roles.  "La personalización es el proceso de reconocer que la persona es plenamente humana,  que no solo  tiene un rol."  "La vulnerabilidad es el ingrediente clave para  que una relación sea  más personal".  Schein  presenta  la "ventana  de  Johari"  y los  filtros ORJI  (Observación, Reacción, Juicio e  Intervención).
Actitud  de  la pregunta  humilde:  reducir  la ansiedad de aprendizaje,  reflexionar,  volvernos  más  conscientes  y  descubrir  al  artista  que  llevamos  dentro.
Gran  libro.  Mi gratitud  a  Edgar  Schein  por  compartirlo.





He estado leyendo "Preguntar con humildad. El sutil arte de pedir en lugar de exigir" de Edgar Schein. Admiro a Schein como padre de la idea científica de las culturas corporativas a principios de los 80. Estudiante en Chicago y Stanford, doctorado en Harvard, pasó cuatro años en un instituto del ejército investigando las relaciones humanas y realizó su primer trabajo importante sobre el adoctrinamiento de prisioneros en la China comunista (Coercive Persuasion, 1961). De ahí pasó a analizar las relaciones del individuo con la organización (Interpersonal Dynamics, tercera edición, 1973, con el gran Warren Bennis) y el concepto de "anclas laborales" (Career Dynamics, 1978). De su conocimiento de las culturas corporativas, dos libros esenciales: "La cultura empresarial y el Liderazgo" y "The Corporate Culture Survival Guide". Schein analizó en profundidad el éxito económico de Singapur y ellegado de Digital Equipment Corporation (DEC). Y su último libro hasta la fecha había sido "Helping:  How to offer, give and receive  help", de 2009.
En la actualidad vive retirado en Palo Alto, tras 50 años de consultoría y docencia. Para Schein, "la pregunta humilde es el arte sutil de conseguir que otros se abran, que formulen preguntas cuya respuesta no conoces, de forjar una relación basada en la curiosidad y el interés por la otra persona".
Para mejorar nuestra comunicación, debemos hablar menos, formular más preguntas con humildad y aprender a escuchar y ser más agradecido. Las preguntas con humildad favorecen la confianza por ambas partes.
Schein define la humildad como otorgar al otro un estatus superior al que reclama para sí. Por ello, la hay de tres tipos: humildad básica, en las sociedades tradicionales, para el estatus por posición social; humildad optativa, por mérito o conocimientos; humildad "aquí  y ahora", que es la que sientes cuando reportas a un jefe. Esencial en el auténtico liderazgo.
El autor  nos presenta varios ejemplos: un equipo quirúrgico,  una pareja, un departamento, un comité de dirección, un nuevo equipo de trabajo, un cambio cultural...  Preguntar requiere de genuino interés, curiosidad y empatía. Sinceridad y colaboración para la apertura.
Hay cuatro tipos  de pregunta: humilde, diagnóstica (control de la conversación),  antagónica (insertar las propias ideas)  y orientadas al  proceso. Nuestra cultura, hasta ahora, es de "hacer  y contar".  Schein es sanamente crítico  con la cultura de EEUU:  valora  más  los  logros que las relaciones,  fomenta  la  desconfianza,  es  de afirmación.  Una cultura pragmatista, individualista y de estatus por logro.  Un reto para  los líderes-coaches en el talentismo.
Los inhibidores de las preguntas humildes son el  propio estatus, el rango y los límites  de los roles.  "La personalización es el proceso de reconocer que la persona es plenamente humana,  que no solo  tiene un rol."  "La vulnerabilidad es el ingrediente clave para  que una relación sea  más personal".  Schein  presenta  la "ventana  de  Johari"  y los  filtros ORJI  (Observación, Reacción, Juicio e  Intervención).
Actitud  de  la pregunta  humilde:  reducir  la ansiedad de aprendizaje,  reflexionar,  volvernos  más  conscientes  y  descubrir  al  artista  que  llevamos  dentro.
Gran  libro.  Mi gratitud  a  Edgar  Schein  por  compartirlo.