El "Cholismo", en ocho claves


Ayer estuve viendo el partido decisivo de la Liga 2013-2014 en casa de mis padres. Mi madre es colchonera, como lo son sus hermanos, porque mi abuelo materno, Leopoldo, era amigo de Vicente Calderón (1913-1987), presidente del Atleti durante 21 años y cántabros ambos.
Como sabes, he tenido la oportunidad de mantener un largo diálogo, de más de una hora, en público con Diego Pablo Simeone, el coach del Atlético de Madrid campeón de Liga y finalista de la Champions, hace unos días ante centenares de profesionales de una importantísima entidad financiera. Para ello, me documenté exhaustivamente como me gusta hacer (entiendo el Liderazgo en el deporte como un “laboratorio” para otras organizaciones) y de esa experiencia creo que he extraído una serie de claves (ocho, el número de la suerte para la mayor parte de los asiáticos) que podemos aprender del “Cholismo”:
- Un equipo se logra desde un equipo técnico de verdad. Equipo (grupo humano que obtiene sinergias). La imagen de la rueda de prensa tras el partido en el Camp Nou, con todo el cuerpo técnico, es definitoria. Para hacer piña, ten una “piña nuclear”.
- En los momentos decisivos, calma. Descanso del Barça-Atlético de Madrid, 1-0. El conjunto blaugrana es por entonces Campeón de Liga, merced a un golazo de Alexis. En lugar de gritar o ponerse nervioso, Simeone comunica a sus jugadores, tranquilamente, que está convencido de que lo van a lograr. La serenidad del líder-coach como motor de la confianza del equipo.
- El Compromiso se libera, porque es energía. De hecho, es la combinación de cuatro energías, comenzando con la energía física (Simeone ha contado con un bloque de 8 jugadores en las tres competiciones). El secreto de la forma física del Atleti es el uruguayo Óscar Ortega (“El Profe”, 55 años, que llegó al equipo rojiblanco en 2004 con Goyo Manzano), en quien Diego ha confiado absolutamente.
- Concentración: el ya famoso “partido a partido”. ¿Marcarse un gran objetivo –la Liga, la Champions- o ir paso a paso? Las dos cosas, evidentemente… con una secuencia. Disfrutar del viaje, del camino, de cada partido (intensidad) para lograr el objetivo (medible, alcanzable y retador, temporal y específico). Hemos de disfrutar del laberinto para alcanzar la meta.
- La actitud (emocional), desde el ejemplo. Jugador apasionado, emblema del doblete del Atleti, Simeone no es de grandes discursos sino de dar ejemplo personal. El ejemplo hace al líder. Un entrenador que no es precisamente triste ni “sinsangre”.
- Los valores. El Compromiso (que va más allá de la Capacidad, de la habilidad técnica de los jugadores) necesita también de energía espiritual, de valores compartidos. Los valores no se negocian, repite el Cholo. Y entre ellos, la humildad como ignición para vencer a los Goliat de la competición.
- La rueda de prensa para la comunicación con la “tribu”. El aficionado colchonero se siente orgulloso de un equipo que gana y lo hace esforzándose, sufriendo. Hay que lograr el éxito y saber explicarlo bien, con una plataforma como el de los medios.
- Cambio de paradigma. El Atleti ha dejado de ser “el Pupas”, víctima de su mala suerte, para ser responsable de su destino. El Presidente Cerezo, a diferencia de otros colegas suyos, ha dejado a su entrenador que eleve el valor (el coraje, la valentía) del equipo tomando las decisiones clave.
La Calidad Directiva marca la diferencia. Presupuesto del Real Madrid 2013-2014, 520 M € (deuda de 91 M €). Presupuesto del FC Barcelona en esta temporada, 508 M €. Presupuesto del Atlético de Madrid, 123 M €. Presupuesto del Sevilla FC, 84 M € (coste de la plantilla: 58’9 M). Si se refleja o no en los resultados, es cuestión de la eficiencia del coach (véase el trabajo de Jesús Javier Pinar, dirigido por el profesor Julio del Corral, de la UCLM).

Mi gratitud y admiración hacia los dos entrenadores de la semana, Unai Émery, campeón con el Sevilla FC de la Europa League (ya sabes que con él tuve la fortuna de escribir ‘Mentalidad Ganadora. El método Émery’) y Diego Pablo Simeone, campeón de Liga con el Atlético de Madrid. Se enfrentarán en la Supercopa de Europa si el Atleti gana en Lisboa el próximo sábado 24 o los dos con el Real Madrid (en Supercopa de Europa y Supercopa de España, respectivamente) si en la final de la Champions lo hace el Real Madrid de Cristiano, Pepe y Coentrao.