Vuelo de las 7,25 a Asturias, a hacer
sendas sesiones de cuatro procesos de coaching. El comandante Ángel Aznárez, de
Iberia, nos ha hecho el vuelo especialmente agradable (le llaman “el piloto con
vocación de guía turístico”; ¿no es precisamente eso, un/a guía, lo que es un/a
líder?). Puedes leer su caso (es historiador y meteorólogo) en www.abc.es/local-galicia/20130607/abci-piloto-vocacion-showman-201306062008.html.
Mi gratitud al comandante Aznárez y a l@s cuatro directiv@s que están
desarrollando su liderazgo y su talento. Son miembros del Comité de Dirección
de una empresa competitiva e innovadora que está creciendo al 30% en estos
difíciles momentos. El éxito no es por casualidad.
He estado leyendo el último libro de
mi buena amiga María Jesús Álava Reyes, “Las tres claves de la Felicidad. Perdónate
bien, quiérete mejor y coge las riendas de tu vida”.
María Jesús Álava es una de nuestras
mejores psicólogas y ha logrado vender más de medio millón de ejemplares de sus
libros, el más popular de los cuales es “La inutilidad del sufrimiento”. En éste,
nos muestra las claves (perdón, autoestima y responsabilidad) que son
pefectamente coherentes con las “doce actividades deliberadas” para la
felicidad expuestas por Sonja Lyubomirsky (“La ciencia de la felicidad”).
La autora demuestra que para ser felices
primero hemos de perdonarnos y dejar de sentirnos culpables por lo que hemos
hecho en el pasado o por lo que hemos dejado de hacer. “Perdonarse es una
maravillosa forma de quererse, de ser amigo de uno mismo, de aceptar que
podemos equivocarnos y aprender de las experiencias difíciles sin perder la
autoestima. Perdonar no siempre es olvidar, pero nos devuelve la paz y premia
nuestros esfuerzos; nos reconcilia con nosotros y con los demás. El perdón nos
permite ser dueños de nuestras emociones y constatar que no hay felicidad sin
sensibilidad, ni sabiduría sin flexibilidad.”
En el libro se detallan:
▪ El caso de Eva. Cuando en la vida
se sufre por todo
▪ El caso de
Daniel. La autoestima bajo mínimos
▪ El caso de
Concha. La tristeza de sentirse una mala madre
▪ El caso de Paco. Cuando no tener
trabajo nos hace sentirnos miserables
Puedes disfrutar de un vídeo en el
que María Jesús Álava Reyes presenta este libro en su web, http://www.las3clavesdelafelicidad.com/
Gracias, María Jesús, por tus
aportaciones tan lúcidas y generosas. Perdonarnos bien, querernos mejor
(especialmente en situaciones muy complicadas) y asumir nuestras propias
decisiones. “Creo que no hay ninguna persona que no encuentre su ejemplo en
este libro”, opina María Jesús. Estoy plenamente de acuerdo.
Por otro lado, me ha parecido valiente
el análisis de mi admirado periodista Ignacio Camacho (merengue y molesto) en
Facebook: “El Madrid, con los otro cuatro equipos de arriba --Barça, Atlético,
Athletic y Sevilla-- ha hecho cinco puntos...¡¡de 21!! Algo dice eso. Sólo gana
a los débiles. Ancelotti politiquea demasiado las alineaciones para complacer
al presidente. Bale juega porque costó mucho más de lo que vale, no participa
en el juego (Hoy ha marcado el Sevilla entrando por su banda porque el señor se
había ido varios minutos a cambiarse de botas). Cristiano y Xabi no están en
forma. Benzema hay días en que es formidable y otros en los que no existe.
Carvajal sube bien pero no tiene conceptos defensivos. Y el portero, Diego
López, se ha vuelto vulgar. Otro portero, el que salva goles y partidos, está
de suplente...¿Se nota que estoy cabreado?”. Ya sabes, Ignacio: del diagnóstico
(certero), la solución y el plan de acción.
Y muy divertido, también en Facebook,
Sinopsis de Cine. Por ejemplo, Dirty Dancing: “DIRTY
DANCING. Bueno, pues hoy he visto “Dirty Dancing” y os voy a contar un poco.
La película va de una chiquina que se va con su familia de campamento de
verano a aprenderse una coreografía y tirarse al profesor de baile. A la
muchacha le llaman “baby”, como a un cerdo de peluche, y la pobre es un tordo
romero. Se lleva un poco mal con su hermana, que es tan tonta que no tiene cola
porque se la mordería.
El campamento familiar es un desparrame: taller de pelucas, merengue,
magia, julepe… Al límite. Están los yayos como en un ambulatorio. Y los
trabajadores mientras tanto restregando la patata en sus barracas que aquello
ya es restregar por restregar, porque después de 8 horas eso ya no da gustito,
eso escuece.
El profesor de baile es más chulo que un pavo con los huevos de un caballo,
y baila con la profesora de merengue como monos peleaos. Cada vez que bailan
los demás se apartan por si les cae un zapatazo o un soplamocos, porque esos
bailan a pata galope.
La Baby baila como mi madre en los cruceros, pero luego el profesor le enseña
un baile que es pasitos de frente, pasitos de espalda, arrechucho que te pego,
te hago la redondilla, cosquillas en la sobaca mora… Y un salto que tú te ves
toda la película entera a ver si al final la lanza patrás y la escalabra, y que
es lo que le da la calidad a la película.
El vestuario está muy bien porque son chanclas con calcetines y las tetas
apoyadas en los pantalones, y la música es muy buena porque dan ganas de
restregarte hasta con el marco de la puerta.
Te la recomiendo si te gusta jugar al julepe o bailar a pata galope.”
Gracias a Carmen Santamaría (en el
día internacional del teatro) por haberme descubierto esa página de Facebook.
En ella se comentan de forma divertida “Operación Dragón”, “Gravity”, “El
silencio de los corderos”, “300: El Origen de un Imperio”, “Los Goonies”,
“Rocky”, “Instinto Básico”, “ET”, “Avatar”, “Barrio”, “Titanic”, “Grease”,
“Regreso al futuro”, “Sister Act”, “Los Gremlins”, “Thor”, “Hulk”, etc. La
monda. Lo hemos pasado de maravilla, riéndonos a tope Pilar, Marta y un
servidor durante la comida (no he perdonado, estando en Asturias, la cazuelita
de fabada, he de decir).