Lunes santo,
con tiempo muy desapacible en buna parte de España.
El País semanal
publicó ayer un extra con el título España
en positivo. Rostros, empresas y desafío que transmiten los valores de un país
en un tiempo convulso. En el artículo inicial, Manuel Vicent se refiere a Dos rutas del espíritu nacional: “Frente
a la España cañí, alimentada de coplas y pasodobles, que caracolea muy feliz
sobre la jaca jerezana, está la España flagelada por el masoquismo
antropológico que se regodea con los males de la patria y halla inspiración
literaria en los males de su historia”. “Hay que elegir entre el derrotismo y
el optimismo, entre el placer de flagelarnos o la lucha denodada por salir
adelante. Esa es la cuestión”.
Al menos, 17
cifras positivas: el Museo Guggenheim de Bilbao (Frank Gehry), las 28 estrellas
Michelin en el País Vasco, Navantia Ferrol
es el tercer reparador del mundo de buques gaseros y el primero en el
Atlántico, las bodegas de La Rioja obtuvieron un récord de exportaciones (de
los 100 mejores vinos en China, 21 son españoles), el AVE de La Meca a Medina,
Grifols (Parets del Vallés, Barcelona) es líder mundial de hemoderivados, 2º
fabricante automovilístico de Europa y 9º a nivel mundial, líder europeo en
agricultura ecológica, el Prado es el 11º museo más visitado, líderes en
energía termosolar, exportación de artesanía en piel, dominio del mercado
mundial del aceite de oliva, exportación de calzado (Elda y Elche), la mejor
balanza turística del mundo (4º país en recepción de turistas, 2º en ingresos),
líder mundial en trasplante de órganos, segunda lengua del mundo (en tres
generaciones, el 10% del planeta hablará español), líder en patentes en
Iberoamérica.
¿De qué podemos
presumir como país? Jorge Cachinero (Llorente & Cuenca) señala que nuestras
fortalezas son hospitalidad, amabilidad, buena gastronomía, buen clima…
Dinámicos, creativos, alta imagen deportiva, altos directivos y escuelas de
negocios. Pero imagen de falta de credibilidad financiera, inversión
tecnológica, rigor, eficiencia.
Frente a esa
visión de logros y de talentos (Carlos Ruiz Zafón, Mª Dolores Dancausa, Ferrán
Adriá, Edurne Pasabán, Antonio Garrigues Walker, José Andrés, Antonio Banderas,
Rafael Matesanz, Pedro Nueno, María Blasco, Jordi Folgado, Fernando Alonso,
Miquel Barceló, Plácido Domingo, Alberto y Cristina Iglesias, Manolo Blahnik,
Tamara Rojo, Andrés Velencoso, José María Fuster.
Hoy en El Mundo, Orfeo Suárez ha llevado a la
selección a Vicente del Bosque, Valero Rivera y Pepu Hernández, seleccionadores
nacionales de fútbol, balonmano y baloncesto que han ganado el campeonato del
mundo (ningún país lo ha logrado, ni probablemente ningún otro lo logrará
nunca). “El deporte pone de acuerdo a España”. “En este momento, y lo digo
modestamente, cuando alguien quiere hablar de la Marca España, nosotros somos los únicos que podemos hacerlo” (VdB).
“Se ha originado una distancia tremenda entre los dirigentes, entre política y
sociedad” (PH). “Yo tengo envidia de Francia, porque van siempre todos a una.
Todos piensan que su equipo representa al país. En España, cuanto más éxito,
más se incide en los aspectos negativos” (VR). “En el fútbol se habla de la
calidad del juego, del estilo, que ha sido importante, pero no creo que el
éxito hubiera llegado sin el comportamiento que han mostrado los futbolistas.
No puedes tener un macarra en la selección…” (VdB). “Los que hemos estado en
clubes serios y formativos nos hemos criado con la obligación de ganar siempre,
pero con la condición de saber soportar la derrota” (VR). “Yo cada día doy
gracias por haber estudiado en el Ramiro de Maeztu y tener latín, griego y
baloncesto” (PH). “El Liderazgo depende del carácter y la experiencia, y
necesita del sentido del humor…” (VdB). “Los elementos clave son justicia,
transparencia, perseverancia y honestidad” (VR). “La decisión final te
corresponde a ti, es ineludible. Pero hay que tener círculos concéntricos que
te protejan. Si no existen, hay que crearlos para poder consultar. Creo que los
tres tenemos la virtud de saber escuchar” (PH).
Muy
interesante. Del análisis sobre España en
positivo y la entrevista con estos tres grandes “coaches” se deducen temas
importantes:
1. No es lo
mismo el sano orgullo (de los logros, individuales y colectivos) que el
optimismo. El sano orgullo está basado en datos y sirve para mejorar (a
diferencia de la soberbia o la arrogancia). El optimismo es un estilo
explicativo de la realidad, pasada, presente y futura.
2. Cuando no se
apela al sano orgullo, el talento –individual y colectivo- no se aprecia, sino
que se deprecia.
3. El optimismo
significa afrontar lo que sale bien y lo que puede salir mejor, y ponernos
manos a la obra.
4. El
compromiso (la energía que le ponemos a un proyecto) depende de un reto
ilusionante y de la credibilidad de los líderes. El Talento es Capacidad por
Compromiso en el Contexto adecuado.
5. La
motivación (el movimiento, la emoción) es cuestión de propósito (sentido,
significado), de autonomía (libertad) y de aprendizaje (maestría). Un país
desmotivado es un país que va cuesta abajo.
6. El clima (el
ambiente laboral, social) depende de la claridad, la excelencia, la aportación,
la innovación, el reconocimiento, el reto, la ventaja) y es prácticamente la
mitad de los resultados.
7. Fluimos cuando
contamos con un reto, con un desafío que nos impulsa, y elevamos nuestras
capacidades a la altura de ese reto.
Me temo que en
esta encrucijada histórica estamos confundiendo el sano orgullo (o la falta de
él) con el optimismo, el compromiso, la motivación, el clima, la fluidez y,
cómo no, el talento. Tenemos razones para sentirnos orgullosos, pero falta
proyecto (un reto ilusionante que nos una) y suele faltar calidad directiva
(que genera el 70% del clima) tanto en lo público como privado. Tenemos que
aprender más y mejor, que educarnos, que desarrollarnos, y que ser más equipo. No
hay otro camino.
Mi agradecimiento
a quienes, como Vicente, Pepu o Valero, saben ser “coaches” de grandes equipos.
Como titulaba José Manuel Velasco como portada en el último número de Capital, “España necesita un coach”.