Anoche mi hija
Zoe, tan futbolera ella, invitó a sus amigos y amigas a ver el partido Real
Madrid-Sevilla por televisión. Unai Emery planteó muy bien el encuentro, que en
realidad fue de poder a poder, pero cuatro “zarpazos” de Cristiano Ronaldo (el
primero, que no pudo detener el portero Beto y fue impulsado hacia la red por
un defensa del Sevilla, lo marcó Benzema en línea de meta; los otros tres, de
disparos de CR7) marcaron la diferencia. Manu del Moral marcó el del honor para
los hispalenses. Un 4-1 algo engañoso, en un partido muy competido y vibrante,
en el que un conjunto blanco diferente (con Mödric y Essien en el centro del
campo, Sergio Ramos asumiendo galones, Albiol y Arbeloa en la defensa y
Benzema, Higuain y Cristiano en el ataque; con Diego López, el portero, en
forma, el Madrid demostró que tiene “fondo de armario”) venció a un Sevilla
renovado. Unai, en rueda de prensa, ha sido autocrítico: “Les hemos concedido
muchas facilidades y con el segundo gol ya era difícil para nosotros enmendar
la situación. Nos ha faltado intensidad de otras veces". "Al final
hay que ver donde está lo que hemos hecho nosotros y lo que han hecho ellos.
Les hemos puesto demasiado fácil las cosas. En los primeros 25 minutos yo no reconocía
a mi equipo. No hemos tenido la constancia de otras veces. Hemos visto a un
Real Madrid que ha ganado con facilidad". "Tenía ilusión en ganar
pero en el partido no se ha correspondido. Mi intención era que hubiéramos
ofrecido otra línea de empaque en el campo. Tenemos que exigirnos y trabajarlo
y el equipo no ha estado en esa línea que esperábamos. Ha sido un partido en el
que hemos estado bastante por debajo". Bueno, es la labor del entrenador.
En un libro muy
interesante de Dave Ulrich, Marca de Liderazgo,
el gran experto en gestión de personas nos muestra los cinco aspectos que
más atraen a los profesionales:
- El
desarrollo profesional (20%)
- Empresa
líder en el sector (14%)
- Empresa
innovadora y con futuro (13%)
- Seguridad
en el puesto de trabajo (10%)
- Trabajo
con excitantes retos (9%)
En definitiva,
el Liderazgo es el gran atractor de talento. Pero no un Liderazgo de viejo cuño
(à la Patton, para entendernos), sino líderes-coaches, que sepan/quieran/puedan
desarrollar el talento de las personas que forman parte del equipo, como hacen
de forma natural los mejores entrenadores deportivos.
Recapitulemos.
La productividad depende en un 60% de la Calidad Directiva (de su capacidad
para atraer, fidelizar y desarrollar talento, que es lo que marca la diferencia),
y por ello es determinante el liderazgo (el de l@s líderes-coaches, que son
estrategas/retadores, hacen equipo e ilusionan desde el optimismo inteligente).
Una empresa en la que abundan l@s líderes-coaches es una institución educativa
(una “learning organization”, según Peter Senge). Una compañía con cultura de
“jefes tóxicos” genera un clima irrespirable. Unas ganas, las otras pierden.
Este mes de
febrero, en la newsletter de los antiguos alumnos del CEU (www.antiguosceu.com/NEWSLETTER/news-febrero/newsletter-febrero-2013.html)
Rosa Heredero me ha invitado a escribir sobre Propuestas en un cambio de ciclo. Para triunfar en el Talentismo
disponemos de seis claves: la empleabilidad, la educación, el proyecto, el
equipo, el contexto –capital organizativo- y construir (deliberadamente) la
felicidad.
Al hilo de todo
esto, he estado leyendo Deja de
estancarte y ¡crece! de Yechezkel y Ruth Madanes, un matrimonio de coaches
de Israel. El título en el original inglés es Del estancamiento al crecimiento. Coaching del Eneagrama. Muy
interesante combinar el coaching y sus técnicas con el eneagrama (las nueves
personalidades que, aplicadas al mundo de la empresa, algunos llamamos
“diversigrama”). La primera parte explica el eneagrama, las preferencias
jungianas y la psicología de las necesidades humanas de Anthony Robbins y Cloé
Madanes. La segunda parte explica el modelo que ellos utilizan (“From stuckness
to growth”, “Del estancamiento al crecimiento”) y en la tercera nos muestran
los “protocolos de coaching” para cada uno de los eneatipos. Curioso y valioso.
“Una metodología que no cree en patologías y que reconoce tanto nuestra
humanidad como nuestro núcleo espiritual”, escriben Don Risso y Russ Hudson,
grandes nombres del eneagrama, en la contra del libro.
Mi agradecimiento a los buenos coaches (como
Mourinho y Emery) y a los buenos equipos (como el Sevilla y el Real Madrid
ayer), a Yechezkel y Ruth y a l@s auténtic@s líderes-coaches (que, de momento,
no llegan al 16% de l@s directiv@s, y por ello son tan escas@s como valios@s).