Código Mourinho y "Código RR"


El fútbol sigue levantando pasiones en este cambio de ciclo. La política, cada vez menos interés. Es comprensible.

Ayer mi hija Zoe, a la que le encanta el balompié, quería ir al estadio Santiago Bernabéu a ver in situ el Real Madrid – Manchester City que iniciaba la UEFA Champions League de esta temporada. Sufrió, vibró y disfrutó de lo lindo.
Me gustó el partido, y me gustó la rueda de prensa de Jose Mourinho. “Esto es el Madrid y el señorío no es filosofía barata, es morir en el campo”. Mourinho lamentó tras el partido del Real Madrid en Sevilla que “no tenía equipo” (y tenía toda la razón, porque un equipo es un grupo humano que genera sinergias), que el responsable de ello era él como entrenador y que en la mayoría había falta de compromiso (y de nuevo acertó: el compromiso es la energía que se pone en el proyecto y si los profesionales no están centrados en lo que es importante –compromiso mental y emocional-, aunque tengan poderío físico y compartan los valores del club, hay insuficiente compromiso). Así es el “Código Mourinho”: ayer el coach portugués dijo muy claramente que lo importante no era ganar o perder, sino dejarse la piel en el campo (“Más importante que la victoria es recuperar el ADN del Real Madrid”). “Vuelvo a sentirme muy orgulloso de mi equipo”. “Llevo tres años y tengo derecho a decir que el madridismo quiere esta entrega”.

Contrasta la épica del equipo blanco (la remontada del Madrid se pagó en las casas de apuestas 41 a 1) y las declaraciones de su entrenador con el “Código RR”. Me refiero a los dos programas de televisión que un lunes tras otro han protagonizado el presidente del gobierno, Rajoy, y el líder de la oposición, Rubalcaba.
Mariano Rajoy ofreció su primera entrevista televisada como presidente del gobierno el pasado lunes 10 de septiembre, con María Casado (TVE) como maestra de ceremonias, y los periodistas Ignacio Camacho (ABC), Victoria Prego (El Mundo), Anabel Díez (El País), Carmen del Riego (La Vanguardia) y Pilar Gómez (La Razón). Si no has visto la entrevista, está en Youtube:
 www.youtube.com/watch?v=1fpdwg50k_s
“¿España necesita un rescate?”, pregunta Mª Casado. “Vamos a ver…”, empieza el presidente. Y luego pone un ejemplo de crédito para pagar una casa que es manifiestamente mejorable. “Si hay algo que no tocaré serán las pensiones” (vaya frasecita). “¿Reduciría el número de diputados?”, pregunta Pilar Gómez. Da datos (el 38% del gasto son Comunidades Autónomas) y no contesta. “Sería absurdo que la gente estuviera contenta con estas medidas”. “¿Por qué hay protestas entre los votantes?”, pregunta Victoria Prego. “Porque a nadie le gusta esta situación”. “¿Le preocupa la deriva independentista en Cataluña?”, le pregunta Carmen del Riego. “En este momento no toca el lío, la disputa ni la polémica”. 19 preguntas, entrevista a medida y aburrido a más no poder.
Una semana más tarde, los mismos cinco periodistas con Alfredo Pérez Rubalcaba, secretario general del PSOE.
www.rtve.es/alacarta/videos/especiales-informativos/entrevista-rubalcaba/1529666/
Le preguntaron por la dimisión de Esperanza Aguirre (“no lo esperaba, le deseo lo mejor”), el rescate (“yo no lo pediría, porque afecta a la marca España”), la responsabilidad del PSOE en la crisis, propuestas de la izquierda (“Europa se ha puesto una agenda de ajuste que es imposible”), si se presentará a la presidencia (“la gente está muy mal y no tiene un futuro por delante; el tema no está ahí”), el modelo federal (“nuestro comité se llama comité federal”), Griñán, Chacón, la subida de impuestos, qué es más difícil: gobernar o estar en la oposición… “Estoy haciendo una oposición responsable”. Un horror.
Mourinho habla de intangibles (la confianza, el compromiso, el equipo, la involucración) que son esenciales, y como él Tito Vilanova y el resto de los mejores entrenadores. Los “erre que erre”, gobierno y oposición, no ilusionan en absoluto. Es un hecho.
¿Nos merecemos dos “líderes” tan aburridos?

Mi gratitud hacia los líderes de verdad, en las empresas, en el deporte, en la política, en la sociedad en su conjunto.
Y los que no, que aprendan de Confucio, uno de los principales filósofos del Talentismo:
“El gobernante sabio, es liberal sin ser pródigo, hace trabajar al pueblo. Quiere y no es ávido, es grande sin ser soberbio, es digno sin ser adusto”. Pues eso.


Por l@s verdaderamente grandes.