Ayer llegué al hotel
en La Coruña a las 2 de la mañana. Los 24 grados de los que disfrutábamos en
Alicante se convirtieron en menos de la tercera parte (7 grados) en Santiago de
Compostela. Y hoy he quedado con Enrique Ulloa a las 8.45 h para ir a la
Escuela de Negocios de NovaGalicia.
Tengo el privilegio de
impartir, hoy y mañana, el Programa de Coaching Ejecutivo, sobre el tema de la
Confianza. Una cuenta corriente emocional (según Stephen Covey), una
expectativa sobre el comportamiento de los demás, la clave de la argamasa
social, uno de los principales intangibles de gestión… He disfrutado mucho con
los alumnos de este programa: Ángeles, Camila, Carlos, Carmen, Daniel, Iago,
los dos Manuel, Marcos, María, Mercedes, Pilar, Raquel (hoy ha faltado Marta).
Profesionales de varias de las mejores empresas de Galicia, de la función
comercial, de RR HH, de riesgos… Muchas gracias por vuestra involucración.
El tema del día ha
sido, sin duda, la marcha de Pep Guardiola como entrenador del FC Barcelona.
Una decisión que se veía venir y que hoy se ha hecho oficial.
La Dra. Leonor
Gallardo hemos escrito en los últimos años una trilogía sobre el coach del
Barça: Liderazgo Guardiola (7ª
edición), Mourinho versus Guardiola (4ª
edición) y Los Mosqueteros de Guardiola.
Guardiola desde el Liderazgo admirable, desde su labor de líder-coach y desde
el espíritu de “La Masía”. En estas cuatro temporadas, hemos aprendido
muchísimo de su forma de entrenar, de su apuesta por el talento colectivo, de
sus valores personales forjados en la cantera azulgrana. Nunca olvidaremos
Leonor ni un servidor su dedicatoria al primero de estos libros: “Gracias por
ayudarme a conocerme mejor”. Un orgullo.
Me han preguntado
algunos medios sobre la decisión de Guardiola. Creo sinceramente que cuatro
años seguidos, a la intensidad con la que los ha vivido Pep, son mucho tiempo.
Agotan física y psicológicamente.
Guardiola nos ha
enseñado a saber ganar, a saber perder, a despedirse cuando toca. Es, sin
embargo, no un punto final sino un punto y seguido. Después del sabático,
Guardiola seguirá escribiendo sus mejores páginas.
Su legado es
impresionante. Lo que ha hecho disfrutar a los aficionados al fútbol,
maravilloso. Y los dueños con Mourinho en las dos últimas temporadas,
sensacionales. Gracias, Pep, muchas gracias.
Cena en Manolito, con
Enrique, Mar y Cristina. Pulpo, croquetas, calamares, merluza, tarta de
Santiago. La gastronomía gallega es de lo mejor.
Y he estado leyendo El Pingüino y el Leviatán. Por qué la cooperación
es nuestra arma más valiosa para mejorar el bienestar de la sociedad, del
profesor de Harvard Yochai Benkler. Un alegato, excelentemente documentado,
sobre las ventajas de la cooperación y contra el capitalismo basado en la
premisa de que las personas somos egoístas, gente de las que uno no se puede
fiar.
Confianza o control.
Son dos modelos mentales contradictorios. Uno es el pasado y el otro se está
imponiendo. Por ello estamos ante un cambio de época, un cambio de era. “Durante
siglos, como sociedad, hemos actuado con una visión muy poco alentadora de la
naturaleza humana: siempre hemos pensado que, básicamente, somos egoístas. En
consecuencia, nuestras estructuras sociales más arraigadas –como por ejemplo
los modelos empresariales jerarquizados– han sido construidas sobre la base de
que lo único que nos motiva es el propio interés y que estamos condicionados
para responder a la mano invisible del libre mercado o al puño de hierro de un
gobierno controlador. Sin embargo, durante la última década, esta falacia ha
empezado a desmoronarse a medida que centenares de estudios han demostrado que
la mayoría de la gente tiende a cooperar mucho más de lo que creíamos. Benkler
nos muestra cómo podemos aprovechar el poder de la cooperación humana para
mejorar los procesos empresariales, diseñar una tecnología más inteligente,
reformar nuestros sistemas económicos, maximizar las contribuciones voluntarias
a la ciencia, reducir los delitos o aumentar la eficacia de los movimientos
cívicos, entre otras muchas cuestiones. El Pingüino y el Leviatán no sólo
cuestiona muchas de las formas en que vivimos y trabajamos, sino que también
nos obliga a replantearnos por completo nuestra visión de la naturaleza humana.”
El libro estará en las
librerías el próximo jueves 3 de mayo.
Merece mucho la pena leerlo.
De todas las páginas
del texto, me quedo con la reproducción de la Declaración del Dr. Alan
Greenspan (un patán que se ha vendido de miedo y llegó a ser presidente del
banco de la reserva federal) ante la Comisión del Senado de los Estados Unidos
para la supervisión y reforma del gobierno:
AG: Aquellos de
nosotros que hemos confiado en el interés propio de las instituciones de
crédito para proteger el capital de sus accionistas (especialmente yo) estamos
en un estado de conmoción e incredulidad.
Senador Henry Waxman:
En otras palabras, se ha dado cuenta de que su visión del mundo, su ideología,
no era correcta. No funcionaba.
AG: Precisamente… ése
es precisamente el motivo de mi conmoción, porque durante cuarenta años o más he
estado convencido de que funcionaba excepcionalmente bien.
A buenas horas, mangas
verdes. La creencia en el egoísmo humano (Hobbes), derrotada por la cooperación
(Rousseau). De La Riqueza de las naciones
a la Teoría de los sentimientos
morales (un Adam Smith por otro). Nuevos tiempos fascinantes, en los que la
cooperación, la comunidad, la confianza, marcan la pauta. ¿Estamos preparados?