Los superhéroes y la filosofía

Jornada en Madrid. Coaching estratégico al primer ejecutivo de una gran empresa europea, inicio de coaching con su segunda de a bordo y he asistido (en plan “shadowing”) al Comité de Dirección, para comentar posteriormente fortalezas y oportunidades de mejora del Equipo. La labor que realizan ejecutivos como ellos es realmente de “superhéroes” por la complejidad de la tarea y de las relaciones.

Precisamente he estado leyendo “Los superhéroes y la filosofía”, de Tom Morris (el autor de los libros sobre Aristóteles y Harry Potter en la empresa) y Matt Morris. Un libro original, que da mucho que pensar.

El texto se divide en cuatro partes:

1. La imagen del superhéroe: ¿Por qué Superman hace lo que hace? ¿Por qué el altruismo? Para sentirse integrado. Como nos enseñó Aristóteles, para encontrar la felicidad hay que vivir la excelencia. Los héroes son, según el Oxford Dictionary, personajes de la antigua Grecia con cualidades sobrehumanas, “guerreros ilustres” y personas admiradas por sus logros y nobles cualidades (super-héroe sería una redundancia). Su modelo, el de Séneca: “Elige a aquel de quien te agradó la conducta, las palabras y su mismo semblante, espejo del alma; tenlo siempre presente como protector o como dechado. Precisamos de alguien, lo repito, al que ajustar como modelo nuestra propia forma de ser” (Epístolas morales a Lucilio). Los superhéroes se toman la justicia porque “¿Quién vigila a los vigilantes?” (Juvenal).

2. El mundo existencial del superhéroe: En ese mundo laico, Daredevil es “el hombre sin miedo” por su fe. “La religión es un mecanismo para hacer frente y bloquear todos los terrores de la vida”. El compromiso total con determinados valores es fuente de fortaleza. Es el personalismo (imperativo categórico de Kant, filosofía de Martin Buber), que no el egoísmo: cada persona tiene un valor absoluto en “el reino de los fines”. Según el psicólogo Lawrence Kohlberg, el desarrollo moral tiene tres etapas: Preconvencional (obediencia a la autoridad), convencional (respeto a los demás) y postconvencional (ética y justicia). Es “el cuerpo de la sociedad como un todo”, que está en Platón, los estoicos, San Pablo o Pascal. Es “buscar un yo superior todavía oculto”. Aristóteles nos hablaba de tres formas de amistad: por utilidad (la de los jóvenes), por placer (la de los adultos) y por virtud (“un alma en dos cuerpos”). “Una ciudad es una comunidad para vivir bien” (Política). “El descenso hacia el escepticismo con respecto a la sabiduría deriva del hecho de que, en comparación con nuestros antepasados, hemos desarrollado actitudes muy distintas hacia la emoción y la información sensorial”.

3. Los superhéroes y el deber moral: Son ejemplo de vida virtuosa y justa, que practica la “ética de la virtud”. No usan sus poderes para sí, sino para los demás; como responsabilidad. “¡El deber me llama!”. “Luché contra la ley, y ganó la ley”. Según Platón, el alma consta de raciocinio, apetitos y fogosidad. La armonía del alma sólo es posible desde la moralidad (las virtudes, según Aristóteles, nos hacen sabios, justos, moderados y valientes). La ética siempre compensa.

4. Identidad y metafísica del superhéroe: Hulk y Bruce Banner (la misma persona). Las identidades secretas (¿qué hay detrás de la máscara?). “Lo que llegamos a ser es el fruto de las actividades en las que nos comprometemos día a día” (está en Aristóteles, en Blaise Pascal, en William James). “Si lográsemos mantener esta verdad en nuestro pensamiento en todo lo que emprendemos, seríamos capaces de controlar mucho más aquello en lo que nos convertimos”.

Un libro fascinante de filosofía. Como escriben los autores, hoy Sócrates se dedicaría a hacer cómics.

Mi agradecimiento hoy a Tom y Matt, a Andreas, Beatriz, Carlos, Ernesto y Elena.