Grietas del sistema

Hoy he tenido la fortuna de participar en la primera reunión del Club de Coaching de Alicante, organizado por FUNDESEM, presentando mi último libro, “Por qué necesitas un coach”.

Aunque se trata de un texto sobre contenidos de Coaching (por qué y cómo desarrollar la vocación, el reto, la audacia, la comunicación, el optimismo, la confianza, la ilusión, el entusiasmo, la felicidad y la integridad), me he centrado en cinco puntos, como son:

- El Desarrollo del Talento: Si no avanza, retrocede.

- Entornos de recompensa y de amenaza.

- El Diálogo, y no el debate, nos hace libres.

- El Poder de la Reflexión… y de la Acción.

- La mejora: Qué metemos en el carruaje.

Alicante, gracias a iniciativas como la de FUNDESEM, se está posicionando estratégicamente a favor del Coaching, lo que es una gran ventaja competitiva para sus empresas. Se está generando un caldo de cultivo de gran interés por el desarrollo personalizado.

He estado leyendo “Grietas del sistema” del profesor Raghuram G. Rajan. Rajan ha sido Economista jefe del FMI (2003-2007) y es catedrático de finanzas de la Universidad de Chicago. En 2005 advirtió de la crisis económica que se nos venía encima; su testimonio aparece en el documental ganador del Óscar “Inside job”. El libro de Raghuram Rajan es muy didáctico y explica muy bien no sólo qué ha provocado el actual momento de dificultad, sino cómo salir de éste.

Para Rajan, esta profunda crisis es producto de una serie de “fracturas” en el sistema, de grietas, como las tensiones de la política nacional (“casi todas las crisis financieras tienen raíces políticas”), los desequilibrios comerciales y los sistemas financieros. La economía está sufriendo un enorme nivel de desigualdad: el 1% de las familias de mayor renta tenía el 8’9% de la renta en 1976 y el 23’5% en 2007. En esos 30 años, el 58% del crecimiento de la renta fue a parar a ese 1% de las familias más ricas. “El sistema educativo no ha logrado proporcionar a la fuerza laboral la instrucción necesaria”.

La respuesta gubernamental (en EE UU y en todo el mundo) no ha sido mejorar la educación para todos, sino permitir el acceso al crédito de los más desfavorecidos. La banca se aprovechó de ello, concediendo créditos a quienes no podían devolverlos y cebando la bomba. Lo que vemos ahora es “recuperaciones sin empleo”.

Me ha interesado particularmente de las explicaciones de este libro la importancia que concede al capital humano y al capital organizativo. La creciente desigualdad de las rentas está provocada por un acceso desigual a una educación de calidad. La rentabilidad es menor en los países pobres por escasez de capital humano (Robert Lucas, premio nobel de economía, profesor de la Universidad de Chicago). “En los países pobres hace falta alguna cosa más para que la maquinaria y las personas con formación maximicen la productividad y los países prosperen”: capital organizativo. Calidad directiva, diríamos otros. “Las diferencias organizativas entre un pequeño taller de reparaciones y Toyota, o entre un consultorio médico instalado en una cabaña y la Clínica Mayo son enorme, y determinan su capacidad para utilizar grandes y sofisticadas máquinas de forma efectiva.”

“Los pioneros ricos del desarrollo, como Australia, Canadá y Estados Unidos, construyeron sus organizaciones complejas con el tiempo”. En cambio, “los índices de fracaso de las compañías pequeñas y nuevas son increíblemente altos incluso hoy”. El Eureka que me ha provocado la lectura de este libro es que, efectivamente, esos gobiernos carecían de capacidad para intervenir: se dedicaban a la defensa y al mantenimiento de la ley y el orden. La cara es la ausencia de educación y sanidad para todos; la cruz es que no alimentaron a una oligarquía clientelista que no tiene el menor interés por mejorar su capital organizativo, por exportar, por crecer, por ser competitivo…

Por eso las compañías “Peter Pan”, que no crecen nunca. Ni están ni se las espera. Y van de burbuja en burbuja.

Mi agradecimiento hoy a los directivos de FUNDESEM: Ramón, Paco, Gabi, Juan Carlos, Pablo, etc. El 40% de sus alumnos proviene de otros países, lo que significa que es una Escuela de Negocios muy competitiva, que está en el mundo. Enhorabuena.