I Congreso Internacional de Coaching

Esta mañana he participado en la sesión inaugural el I Congreso Internacional de Coaching, organizado por AECOP. La Asociación Española de Coaching y Consultoría de procesos (AECOP), perteneciente a la EMCC (European Mentoring & Coaching Council) es la asociación de referencia en Coaching Ejecutivo. Su Presidente, Manuel Seijo, ha tenido la amable idea de iniciar el Congreso presentándonos a la Junta que iniciamos la asociación hace diez años: Carlos Herreros de las Cuevas como Presidente, un servidor como VP, Carlos Pelegrín (Orange) y Krista Wallochik (NB). No han podido estar con nosotros Carlos López Combarros y Patricia Martel (Repsol), a quienes hemos echado de menos en este grato recuerdo.

Después, una conferencia de David Clutterbuck que, sinceramente, me ha resultado muy poco interesante. No es la primera vez que escucho a un ponente anglosajón de fama internacional (50 libros sobre desarrollo, coaching y mentoring) que no debe saber muy bien a qué audiencia se dirige y que la trata como si no tuviera la menor idea del tema.

Tras la pausa del café, dentro de las tres sesiones paralelas, ha elegido la de “Presente y futuro del Coaching”, moderada por Miguel Udaondo, con Carlos Ongallo, Alfonso Jiménez y Luis Miguel Gonzalo.

El Dr. Carlos Ongallo, director de EBS y de la Obra Social de la Caja Extremadura, ha estado, como suele ser habitual, muy brillante. Ha citado la definición de Coaching ejecutivo (ligado a las empresas, con objketivos y resultados), para diferenciarlo de otras formas de coaching (lo que es muy de agradecer en estos tiempos en los que el life coaching suele confundirse con el ejecutivo) y, dado que el Coaching está de moda, nos ha presentado las 10 tendencias de la temporada:

1. Perfil del coach, con certificación y permanente actualización, para que avance como oficio serio y digno. El coach no es un director espiritual, no es un psicoanalista y no es un asesor empresarial.

2. Sentido común: menos psicologicismo y más resultados.

3. Unicidad (no unidad) de criterio.

4. Una sola acreditación mundial (de AECOP, EMCC y FIACE).

5. Condiciones: Ahorro de tiempo, sesiones más directas.

6. Necesidad de reciclarse: Formación continua, actualización de perfiles.

7. Reactivar la consideración positiva: Buena antropología del coaching. “Pregunta qué imagen del hombre tiene la persona que va a educar a tu hijo”, José Ortega y Gasset.

8. Autenticidad: Conocimiento empresarial y experiencia del coaching.

9. Escucha activa.

10. Tres indicadores. Trabajo en equipo, generosidad y Análisis/Síntesis.

Finalmente, Carlos Ongallo ha utilizado como ejes las tres prioridades del líder-coach (aprovechamiento del potencial, adaptación a nuevas realidades y mejora de la contribución) con el PAS de primeros auxilios (Proteger, Alertar y Socorrer9 a través de nueve preguntas estratégicas. El Dr. Ongallo ha insistido que se trata de un Congreso científico y nos ha ofrecido en apenas 8 minutos una clase verdaderamente magistral de tendencias.

Alfonso Jiménez (actualmente, director de relaciones institucionales del Consejo Superior de Deportes) ha contado su experiencia como “cliente de coaching”. “En el último año me he dado cuenta de la verdadera importancia del coaching”. Ha narrado lo que supuso, en sus tiempos en Paradores, invertir en formación y desarrollo de relaciones humanas. Hubo un cambio abismal en Paradores a partir de las visiones globales. Y nos ha ofrecido una valiosa reflexión: “Muchas empresas temen la fortaleza de los equipos, porque a veces el equipo es más fuerte que la Alta Dirección”. Ya como Director del Hotel Wellington, una empresa tradicional, de toda la vida, “en la que no había ventanas hacia la calle”, decidió invertir en Coaching ejecutivo para él (ha tenido la generosidad de nombrar a un servidor como su coach) y para sus equipos. En momentos de crisis es cuando el coaching es más necesario. “El coaching no es el caramelo del rico, sino la sopa del pobre”. “Creo profundamente en el coaching” Y ha establecido un paralelismo con la tauromaquia (Alfonso Jiménez es un gran experto en el arte de cúchares). En el mundo del toro, en poco tiempo te vienes arriba, ves la luz, la gloria, la desgracia… Al lado está el padre, el apoderado, que le ayuda a reforzarse como persona. Y una reflexión final sobre el coaching y el talento: “No hay mejor profesional que el que cada día va ilusionado al trabajo”. Como la de Carlos Ongallo, la presentación de Alfonso Jiménez ha resultado magnífica.

Finalmente en esta sesión, Luis Miguel Gonzalo, director territorial de Telefónica, ha contado su experiencia como cliente de coaching y lo ha recomendado para la reflexión y la acción a todos los asistentes. Desgraciadamente, no he podido quedarme al turno de preguntas, pero me han comentado posteriormente que ha brillado a muy buen nivel.

Por la noche, ha quedado a cenar con Enrique Ulloa (el bueno de Enrique, presidente de AECOP Galicia y empresario sagaz, suele “quejarse” –es broma- que siempre sale en este blog comiendo o cenando, pero es que es un contertulio fabuloso) en el restaurante xacobeo Ultreya, en el barrio de Salamanca. Hemos hablado del mundo empresarial, del coaching, de lo divino y de lo humano. Y lo he pasado estupendamente, porque Enrique es incisivo, irónico y muy divertido. Es uno de los ejecutivos más brillantes que conozco y una persona de una sola pieza.

Mis agradecimientos de hoy a las decenas y decenas de personas que ha saludado cariñosamente en el Congreso de AECOP, provenientes de Valencia, Baleares, Canarias, Catalunya, Madrid, Galicia…