Dos finales (o tal vez tres)

Mourinho ya tiene su primera final contra el equipo de Pep Guardiola. En las semifinales de la Copa del Rey, el Real Madrid ganó 3-0 al Sevilla en el cómputo de la eliminatoria y el F. C. Barcelona 8-0 al Almería en un nuevo ejercicio prodigioso de aprovechamiento de la cantera (especialmente en la vuelta, a domicilio, y con una renta de cinco goles). Las ruedas de prensa de Pep y Mou, como casi siempre, muy didácticas. A Guardiola le preguntaron a quién prefería para la final (su partido empezó dos horas antes que el del Bernabéu). Su respuesta: “A quien más lo merezca”. Los valores del deporte, de principio a fin. Más allá de la polémica que genera espectáculo, cultura del esfuerzo y del talento, como debe ser.

Por la mañana en Madrid, con propuestas de Eurotalent Sport realmente interesantes, y después con un potencial cliente que está viviendo un apasionante proceso de transformación. Una empresa grande, con cuatro décadas a sus espaldas, con profesionales muy preparados, que estoy seguro que va a vivir una “segunda juventud”, tras la crisis de los 40. Va a afrontar los retos de un mundo nuevo (internacionalización, innovación, aprendizaje acelerado a partir de un corporativo eficaz que difunda y comparta las mejores prácticas y que ayude a que cada división no tenga que ‘inventar la rueda’, con mayor o menor éxito, a cada ocasión). Me ha gustado mucho la reunión que hemos tenido con su equipo de desarrollo interno, porque afrontan la realidad (que no es precisamente agradable), tienen convicción y cierta humildad. Ahora, Sangre, Sudor y Lágrimas.

Y también la participación en una nueva fusión de entidades financieras. Nos jugamos mucho en esa partida: empleos, concesión de créditos, competitividad. Espero que vayan paso a paso para que la integración sea un éxito (más del 80% fracasan en términos de creación de valor porque improvisan, se dedican principalmente a peligrosos juegos de poder y a sembrar la desconfianza y en definitiva desprecian el talento individual y colectivo). ¿Cómo se puede hacer bien? Más allá de una estrategia, un organigrama y unos sistemas de información comunes (esa es la tarea fácil de la dirección), se necesita imperiosamente:

- Generar una visión de futuro, unos valores y un modelo de negocio compartidos desde la realidad de un equipo de dirección de verdad (un equipo, un grupo humano que obtiene sinergias, se consigue con un facilitador externo con experiencia en el coaching estratégico de equipos; por generación espontánea es auténticamente imposible).

- Elaborar perfiles de talento (aptitud, actitud y nivel de compromiso) que sean responsabilidad, no sólo de la DRH, sino de todo el Comité de Dirección. Sin esos perfiles, clave para la gestión del desempeño y la promoción, la nueva entidad ira desorientada y lo pagará caro.

- Analizar, medir y hacer seguimiento del ambiente de trabajo (el clima laboral), que significa más del 40% de los resultados. El riesgo de “cambio climático” si no se gestiona esta variable profesionalmente es muy alto.

- Liderazgo del primer ejecutivo (del tándem y/o del quinteto, según se hayan repartido los papeles). Un líder en momentos tan complicados que no cuente con un coach estratégico está asumiendo riesgos innecesarios, porque el tiempo no corre precisamente a su favor.

Si la fusión carece de esas cuatro bazas fundamentales, es prácticamente imposible que salga adelante con éxito. Como cantaba Serrat: "nunca es triste la verdad; lo que no tiene es remedio".

Una fusión es la demostración palpable de aquellas palabras de Antoine de Saint Exupery en El Principito: “Lo esencial es invisible a los ojos”. Aunque muchos financieros e ingenieros no se sientan precisamente cómodos gestionando intangibles, por decisivos que sean.

Tren a Valladolid a las 14.40, para llegar al almuerzo con los responsables del Club Emprende (una magnífica iniciativa para desarrollar el emprendizaje, con Carlos Burgos como Presidente y David Galindo de Vicepresidente), junto con la Dra. Leonor Gallardo, co-autora de “Mourinho versus Guardiola. Dos métodos para un mismo objetivo”, que está consiguiendo muy buenas ventas (ya en segunda edición, a pesar de que la primera fue de 8.000 ejemplares). Hemos estado hoy con la Cadena SER, El Mundo, El Norte de Castilla, etc. Coincide el morbo de Mou vs Pep de cara a su primera final (en principio, el 20 de abril en Mestalla, aunque no es seguro, puesto que cuatro días antes tendrá lugar “el clásico” que puede decidir definitivamente la liga y la semana anterior la vuelta de cuartos de la Champions).

A las 20.00 horas, en el salón de actos de la facultad de empresariales de la emblemática Universidad de Valladolid, junto al único río de España con nombre femenino (La Esgueva), Leonor y un servidor hemos tenido el honor de dirigirnos al público (había entrada libre y, a pesar de que estamos en fechas de exámenes, la sala ha estado muy concurrida), hemos repasado brevemente nuestros libros conjuntos anteriores (“Liderazgo, Empresa y Deporte”, “La Roja. El triunfo de un equipo”, “Liderazgo Guardiola”, “El Mundial de La Roja”) y sus modelos tácitos (el de 5+1 E, el pensamiento de sistemas, el de las empresas más admiradas y el de atracción, fidelización y desarrollo del talento, rspectivamente). No hay nada más práctico que una buena teoría. Después hemos repasado, con ejemplos recientes de Mourinho y Guardiola (a partir del 5-0 del 29 de noviembre, que es la fecha alrededor de la que salió el libro), las diez cualidades del líder-coach (el/la líder que capacita a su equipo y consigue que sus integrantes den lo mejor de sí mismos), desde “saber mandar y decidir”, la credibilidad (autoridad moral) y la escucha activa, hasta la serenidad, la humanidad o la ecuanimidad, pasando por “prescindir de tóxicos”, “poner el foco en el cliente”, anticipar el éxito (perseguir un sueño) o canalizar las emociones (ni euforia ni disforia). La diferencia está en los clubs a los que sirven (uno, más parecido a una empresa familiar, paradigma de eficiencia; el otro, una multinacional, que maximiza los ingresos). Cantera o cartera. Messi o CR7.

Es la "centralidad del entrenador", la calidad directiva, que supone el 60% de la productividad. O mejoramos la calidad directiva, o España tiene un futuro muy poco esperanzador. Los ganadores, las empresas que están saliendo fortalecidas, lo saben y lo practican.

Ha sido una lástima que no haya podido asistir a la presentación del libro “El mantra del talento”, de mi buen amigo José Manuel Casado, uno de los principales expertos en la gestión de RR HH en España. Pero hemos cogido el tren de vuelta de las 22.10 horas que ha llegado a la estación de Chamartín a eso de las 23.30 h. Un viaje muy animado, charlando con Leonor sobre nuevos proyectos editoriales. El deporte es la mejor metáfora que tenemos para hacer mejor las cosas.

Mis agradecimientos de hoy a Jorge y Natalie; a César, Ignacio, Laura, Juan Pedro y Carlos; al Club Emprende (Carlos y David, que desinteresadamente fomentan el desarrollo de emprendedores en Valladolid: estoy a vuestra disposición, porque sois encantadores) y a Leonor.

En un par de meses, viviremos dos finales entre Mourinho y Guardiola. Y quién sabe si la tercera, la de la Champions, en Wembley. Sería una maravilla.