Con la nieve, a disfrutar del contexto

Hoy hemos salido con los participantes de la primera promoción del Executive MPA (MBA con la P de personas) nada menos que a Urdaibai. Aunque la ceremonia de graduación será a finales de junio, celebramos este fin de semana como colofón de una aventura educativa apasionante.

El viaje ha sido de 13 horas, desde las 10.30 que hemos salido de la sede de la Escuela de Negocios del CEU, en la carrera de San Francisco, hasta las 23.30 que llegábamos a cenar a un restaurante en Ibarrangelu, cerca de Txopenbenta.

De todos los que íbamos en autobús (una decena de alumnos, cuatro profesores del MPA, la directora de la Escuela de Negocios del CEU y el coordinador del MPA, además de mi hija Zoe), nadie ha pedido –ni siquiera comentado- dar marcha atrás y quedarnos en Madrid. Lo hemos llevado con una actitud positiva y un ánimo maravilloso, a pesar de la nieve en toda la Comunidad de Madrid. El conductor, Andrés, ha sido excelente. Nos ha sacado por Alcobendas y San Sebastián de los Reyes. Hemos comido en Boceguillas, a 110 kilómetros de Madrid, a eso de las tres o tres y media.

En Burgos hemos recogido a María y en el aeropuerto de Bilbao, a María del Mar (que venía de Sevilla).

A lo largo de tantas horas, hemos estado charlando de mil cosas. Hemos convertido, todos, una amenaza (de aburrimiento, estrés, agobio) en una magnífica oportunidad. Parece extraño que, pese a tanto contratiempo, hayamos llegado encantados.

Tiene pinta de ser un broche de oro para un Máster realmente innovador.